La comisión de regularización de la FIFA nombrada en la FESFUT rindió un informe escueto de casi nueve meses de gestión. Queda mucho por hacer.
De los 12 meses de mandato otorgado por la FIFA a la comisión de regularización nombrada para la Federación Salvadoreña de Fútbol (FESFUT), el 22 de mayo se cumplirán nueve meses de gestión y, por ahora, los avances en materia administrativa han sido pocos.
Y no es porque no ha habido trabajo, al contrario, el desorden ha sido tal que en nueve meses la comisión ha estado muy ocupada ordenando y creando procedimientos para mejorar el funcionamiento administrativo del ente federativo, incluidos algunos procedimientos jurídicos deportivos que provocaron (y siguen en menor medida) desempeños deficientes de algunas comisiones, especialmente, la Disciplinaria. En el mismo orden, el aspecto financiero de la FESFUT, muy golpeado por decisiones de anteriores comités ejecutivos, ha ocupado gran parte del tiempo de esta comisión.
Sin duda, y como dice el dicho popular: no es lo mismo verla venir que tenerla enfrente, los miembros de la comisión no se imaginaban lo complicado que estaba (y está) el tema organizativo/estructural del fútbol salvadoreño.
Se han dado cuenta de que llevar una carga administrativa propia y una responsabilidad deportiva del fútbol salvadoreño no es sencillo, toda vez los miembros de la estructura han estado actuando a sus anchas por no tener una autoridad que ejerza su rol como debe ser.
En la recién conferencia de prensa brindada por la comisión, Humberto Sáenz, el presidente, afirmó que, en los casos de realizar una auditoría, revisar y modificar estatutos, así como elaborar un reglamento de elección de comité ejecutivo los avances han sido nulos.
Sáenz adujo factores externos que no estaban bajo control de la comisión, seguramente, refiriéndose al tema de la documentación financiera que está en poder de la Fiscalía que impide hacer una auditoría de los fondos manejados por el último comité ejecutivo.
De hecho, respondió en redes sociales que ese aspecto también ha dificultado trabajar en los estatutos, incluso por mismo pedido de FIFA.
En tal sentido, es casi imposible que esta comisión termine su cometido en el año de gestión que le fue concedido. Cuando se llegue el 22 de agosto de 2023, la comisión no habrá llamado a elección de un nuevo comité, de hecho, tendría que elegirse un nuevo comité 30 días antes de que entre en vigor el período de cuatro años de las nuevas autoridades federativas.
Así las cosas, nos acercamos a que esta comisión tendrá que prorrogar su mandato y deberá seguir lidiando con el tema de la falta de documentación financiera de la FESFUT en poder del Estado, porque el caso de las presuntas violaciones denunciadas por el INDES sigue en proceso de investigación, misma que también en nueve meses no ha tenido avances, o no se ha dado a conocer detalles.
Obstáculos en el camino se los encontrará la comisión, sin duda, tanto de la misma estructura del fútbol como de agentes externos cuya finalidad es controlar el deporte rey de los salvadoreños.
Por Orestes Membreño
Periodista deportivo
Colaboración especial para Revista La Selecta
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