La reciente derrota (y penosa) de la selección nacional ante Japón vuelve a destapar males de nuestro fútbol que creía que con Hugo Pérez estaban por superarse.
En el horizonte, la Copa del Mundo 2026 es una oportunidad de redención para la selección nacional, ya que tenemos la posibilidad de romper con una larga sequía.
De los 12 meses de mandato otorgado por la FIFA a la comisión de regularización nombrada para la Federación Salvadoreña de Fútbol (FESFUT), el 22 de mayo se cumplirán nueve meses de gestión y, por ahora, los avances en materia administrativa han sido pocos.